La cuna de Navidad: historia, origen y tradición

El
Pelén de Navidad
es una representación artística de la natividad de Jesucristo y es una de las tradiciones más antiguas y extendidas en el mundo durante las celebraciones navideñas. Esta emblemática escena ha sobrevivido a lo largo de los siglos y se ha adaptado a las diferentes culturas europeas hasta convertirse hoy en día en un elemento básico de la época festiva. Conoce más sobre la historia, el origen y la tradición que rodea al Belén de Navidad en este artículo.

Contenido


Alternar

El origen de la cuna de Navidad

La palabra «cuna
»
viene del latín «cripia» que significa pesebre. La primera mención del nacimiento de Jesús en un establo se remonta al siglo II con los escritos de San Justino. Sin embargo, fue en el siglo XIII cuando esta representación tomó realmente forma, gracias a San Francisco de Asís. En 1223, organizó la primera representación viviente de la Natividad en Greccio (Italia), con personas y animales reales. Se invitaba a los fieles a acudir a rezar ante esta escenificación para reflexionar y meditar sobre el nacimiento de Cristo.

La popularización del belén

A lo largo de los
siglos, el belén se democratizó y se extendió por toda Europa. Se convirtió en una tradición esencial de las celebraciones navideñas, y adoptó diferentes formas según el país y la cultura. He aquí algunos ejemplos
:

  • Cunas italianas
    :

    Ricamente decoradas y animadas por complejos mecanismos, presentan personajes vestidos a la moda napolitana. Estos catres se exponen a menudo en las iglesias.
  • Cunas francesas:

    Más sobrias, se inspiran en la vida cotidiana y en el terruño local. Los personajes, llamados «santons», representan los distintos oficios y categorías sociales de la época.
  • Belenes polacos:

    Se distinguen por su arquitectura inspirada en las iglesias de madera góticas y barrocas. En cuanto a los personajes, son de cartón piedra y están ricamente vestidos.
  • Belenes españoles:

    Suelen presentar un gran número de personajes, hasta varios centenares, así como minuciosas reconstrucciones de paisajes naturales con ríos, árboles y montañas.

LEE TAMBIÉN: Adornos navideños con piñas: ideas creativas para sublimar tu
interior

El simbolismo del
belén

La puesta en escena del
nacimiento está cargada de fuertes símbolos, que permiten a los fieles meditar sobre el profundo significado de este acontecimiento :

  • Niño Jesús:

    Colocado en el centro del belén, encarna la humildad y la pobreza. Su nacimiento en un establo nos recuerda que el hijo de Dios eligió vivir entre los más indigentes.
  • María y José:

    Simbolizan la
    familia
    y la fidelidad a Dios. Su presencia junto al niño Jesús atestigua también su aceptación del papel que se les ha encomendado.
  • Los animales:
    El burro y el buey se asocian tradicionalmente a esta escena para ilustrar la universalidad del mensaje cristiano. Su aliento calienta al niño Jesús, significando la unión entre lo divino y lo terrenal.
  • Los pastores:

    Primeros testigos de la natividad, representan la acogida reservada a Jesús por los humildes y sencillos.
  • Los Reyes Magos:

    Gaspar, Melchor y Baltasar traen preciosos regalos al niño Jesús (oro, mirra e incienso) en señal de reconocimiento de su naturaleza divina. Encarnan la sabiduría y la piedad.

Las diferentes etapas en la construcción de un belén

La
preparación del belén es un momento importante para las familias cristianas durante el Adviento. Estos son los principales pasos a seguir
:

  1. Crear la decoración
    :
    Se
    debe elegir un lugar adecuado para montar el belén, normalmente cerca del
    árbol de Navidad
    . A continuación, se puede crear un paisaje natural con materiales como musgo, arena o guijarros.
  2. La instalación de
    los personajes:

    Los santones se van disponiendo poco a poco a lo largo de los días previos a la Navidad. María y José ocupan su lugar desde el principio del Adviento, mientras que el niño
    Jesús
    no se añade hasta Nochebuena. Los Reyes Magos, por su parte, llegan el día de la Epifanía (6 de enero).
  3. Las iluminaciones:

    El belén suele iluminarse con velas, guirnaldas eléctricas o lámparas de aceite, que simbolizan la luz divina que guía a los creyentes hacia Cristo.

LEE TAMBIÉN: El Cascanueces: una
tradición
navideña
ineludible

El
Pelén de Navidad
es una tradición centenaria que perdura en el tiempo, a pesar de los cambios culturales y religiosos. Es un elemento central de las celebraciones navideñas, que permite a los fieles reunirse en familia para compartir un momento de contemplación y meditación en torno al nacimiento de Jesucristo.

Artículos similares
:

Ideas creativas para decorar tu Navidad con
troncos

El Cascanueces: una tradición navideña imprescindible

Crea tus propias chucherías: DIY, de papel, personalizadas, con lazo, colgantes y en
racimo

La increíble historia de las medias de Navidad: orígenes y
tradiciones

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *